14 junio 2012

La quietud del movimiento

Es probable que sea la última en enterarme que existe este genial blog; Underground New York Public Library, pero más vale tarde que nunca... y el lector que me diga que no se dedica a mirar que libros leen otros viajeros en el metro-tren-autobus le llamo mentiroso, que somos todos unos cotillas.

"House of Sand and Fog," by Andre Dubus III

"Monster Hunter International," by Larry Correia


Una de las insospechadas consecuencias (no quiero generalizar, pero estoy convencida que a muchos nos pasó igual) de ser estudiante de literatura es una nueva habilidad para parecer una mula de carga: libros arriba y abajo, diccionarios que parecen ladrillos, manuales, textos de consulta, textos levemente relacionados con la consulta, tomos de estética, de filosofía, de la temporalidad de los verbos, etc. A lo largo de la carrera llegas a cargar con una gran cantidad de libros y aprendes maniobrar como si fueras malabarista cuales te compras y cuales consultas en la biblioteca; al mismo tiempo que descubres lo que puede significar aprovechar ciertos momentos para adelantar trabajo... y adelantar trabajo para un estudiante de filología es leer una ingente multitud de libros, así que los viajes, en cualquier método de transporte urbano (o interurbano), se convierten en bibliotecas temporales. 

Con los años hay costumbres que se asientan y alrededor de las cuales adaptamos y modificamos nuestro comportamiento: a día de hoy soy incapaz de salir de casa sin un libro, lo que hace, por ejemplo, que siempre lleve música encima, porque nada me distrae más fácilmente de un texto que oír a gente hablando, y que hace que todos mis bolsos (y bolsas) sean lo suficientemente grandes para que quepa un libro (o más) en ellos. 

Me encanta leer de camino hacia y de vuelta del trabajo, salgo y entro del metro ya leyendo, me encanta ver a gente leyendo y, como muchos, tiendo a intentar averiguar que lee la gente de mi alrededor... por lo que, cuando una vez leí que llevar un libro en la mano era un acto de vanidad, creo que me dio un ataque de risa. 

Sólo en uno de los países considerados más incultos de Europa, donde modelos y demás pobladores de la televisión se vanaglorian de no haber abierto un libro en su vida, demostrar que te interesa la lectura y la cultura, sencillamente llevando un libro por la calle, se puede considerar vanidad. 

Me parece más interesante, por el contrario, pensar en este extraño espacio que parecen ser los transportes públicos. Leer es un proceso inherentemente privado (en la actualidad y desde que San Agustín demostró que se podía leer en silencio); el metro es uno de los espacios públicos más usados y más breves (transitorios, efímeros) de nuestra modernidad. ¿Que nos lleva a exponer parte de nuestra privacidad en semejante espacio público? ¿Qué nos lleva a la abstracción interior en un espacio literalmente en continuo movimiento?


18 comentarios:

  1. Estupendo proyecto y buenas fotos. No es el único que documenta a la gente leyendo en transporte público, yo me hice eco hace un tiempo de uno similar en Toronto: http://notasparalectorescuriosos.blogspot.com.es/2011/09/gente-leyendo.html
    Con el auge de los ebooks, nos vamos a quedar sin saber qué lee el vecino de asiento. ¡Una gran pérdida! ;)

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    1. Vaya! parece que han eliminado el blog...
      XD si que será un poco una perdida... o aprenderemos nuevas maneras de cotillear!

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  2. Creo que me has dado una idea para una entrada, algo así como "Libros que leía la gente en el metro de Londres (y en el avión)". Me parece muy sugerente mirar que se lee en el metro y a pesar de que ahora lleguen los ebooks continuo mirando aunque es mucho más difícil poder descubrir que leen... Y voy a poner la página en Favoritos ;)

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    1. XD seguro que será una entrada interesante, me encanta a mi también ir mirando que lee la gente!

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  3. Todos los lectores somos unos cotillas y nos encanta. Buena página. Me he entretenido buscando coincidencias.Saludos

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    1. Es superentretenida, verdad? sobre todo pq te pone el libro que están leyendo...

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  4. Muchas veces me han dado ganas de hacer fotos a gente que está leyendo en diversos entornos y en concreto en el metro. El problema es que soy muy vergonzoso (que si, que si...) y siempre creo que vana a levantar la vista y pillarme. Tengo fotos de gente sentada en sus ventana en el MAgdalen College de Oxford, en Hyde Park, en los jardines d ellas Tullerías...
    Por ello me encantan tus fotos. Bueno, por ello y por su calidad técnica.
    Y desde luego, al fiera que comentó lo de que llevara un libro en la mano era un acto de vanidad, le regalaba yo algún libro que se me ocurre....

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    1. Confusión! Culpa mía, que lo puse al principio, pero no puse los créditos al final: las fotos no son mías XD, son del genial blog que menciono...
      Yo estoy ganando en cara para sacar fotos a gente que no conozco, lo reconozco, pero tengo que alcanzar el nivel de esta chica!

      Je! más de uno le *regalaría* yo también!

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  5. No eres la última en descubrir esa página, sino yo. Gracias a ti XD Yo soy uno de los lectores de tren habituales y la verdad es que me da un poco de pena ver allí a otros leyendos, porque suelen cargar con los ladrillos "crepusculeros", "best-sellers" históricos o cualquier chorrada que esté de moda en el momento.

    Cada vez se ven más e-books, eso es verdad.

    Un saludo!!

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    1. XD yo que me llevo siempre libros que me quepan en el bolso! ya hice de mula de carga durante años, no lo pienso repetir ahora...
      Es un blog chulo, no?

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  6. No has sido la última. ¡Gracias por el descubrimiento! ¿Filología inglesa o hispánica?
    Creo que me has enganchado al blog. Oye, no veo por ningún sitio la ventanilla de suscripción por correo. ¿Why do you insert it? -I ask.

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    1. ...oh, nunca pensé en que tendría suficientes lectores para justificar un newletter, pero miraré como hacerlo. No, gracias por leer el blog!

      Soy de hispánicas, con un montón de asignaturas de inglesa mezcladas.

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  7. Pues si, yo fisgo lo que lee la gente que tengo al lado. Hace no mucho me dijo una señora entrada en años el título del libro que tenía para evitar que me partiera el cuello con una contorsión imposible para descifrarlo desde el asiento del frente...
    Gracias por compartir tu descubrimiento, ahora mepaso por la web pero ya el nombre me gusta.
    Besos

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    1. XD muy buena anécdota! lo gracioso es que ella también adivinó lo que querías, no?
      Seguro que te gusta... pone los títulos de las libros!
      Bss

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  8. Pues yo tampoco conocía ese blog, me iré luego a echarle un vistazo. Y sí, yo tampoco puedo evitar echar un vistazo a ver qué leen los demás, es superior a mí ja ja Lo de la vanidad, en fin, pues eso, que con los índices de lectura que tenemos y con el desparpajo con que mucha gente me dice "yo no leo nunca" poco se puede hacer, intento no escandalizarme ya ni intentar argumentar que la lectura es uno de los mayores placeres de la vida que al final siempre siento que la rara soy yo y no ellos. Un besazo

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    1. Si, supongo que lo mejor sería no escandalizarme... pero es que es superior a mis fuerzas, con tantas facilidades para adquirir educación y cultura, tanta gente que la desaprovecha, me pone tan triste... que me enfado! XD
      Espero que te guste el blog, punto flaco de todo lector!

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  9. Creo que, de momento, el último soy yo en descubrir esa página XD

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